EMPIEZA LA CONTROVERSIA


El último anuncio de Telmex ha despertado ámpula entre los competidores: inviértale es la frase del nuevo comercial de la telefónica de Carlos Slim Helú, pero vale la pena decir que dentro de la telefonía fija, la competidora directa con Teléfonos de México, sí existe un competidor que ha invertido: Axtel.

Axtel, de origen regiomontano, ha invertido alrededor de mil millones de dólares, pero ahora su problema es que le resuelvan todos los temas pendientes en la Cofetel y que el mismo Telmex le brinde interconexión en más de 190 puntos de interconexión que abarcan 12 ciudades.

Y no es lo único: Axtel, bajo la presidencia de Tomás Milmo, mantiene su inconformidad con el mecanismo del que llama paga nacional, porque no les pasan tráfico, y además, porque Telmex les cobra todavía más caro que a sus propios clientes directos.

La polémica ha llegado a tal grado que incluso Axtel ya mantiene un litigio legal contra Héctor Osuna, el presidente de la Cofetel, quien es curioso que se haya negado a brindarle apoyo a una compañía pequeña que está inviertiendo, porque Osuna ha sido defensor de la apertura telefónica.

Como sea, la compañía regiomontana habla de tener pérdidas de 30 millones de dólares por estos diferendos.

Hablan de tener alrededor de 30 trámites en la Cofetel sin que les hayan contestado, hasta haber solicitado la revocación de los títulos de concesión de las compañías de telefonía móvil por no acatar fallos de los tribunales.

Las autoridades sí deben ver la situación de Axtel, la cual terminó absorbiendo a Avantel, porque si no se le ve corre el riesgo de terminar siendo pequeña frente a Telmex como fueron los casos de Protel, Maxcom o Alestra. Y justo lo que se necesita en telecomunicaciones es contar con más competencia.

Google designa a John Farrel como director para México de la empresa del buscador de internet. La designación fue dada a conocer por Alberto Arébalos, director de comunicaciones y asuntos públicos para América Latina de Google, justo ayer cuando la empresa llevó en México un seminario al cual vino Eric Schimdt, presidente de Google o CEO mundial.

Este sitio de internet ha resultado tener un modelo exitoso de negocios en el mundo y México, a través de su buscador, donde el usuario lo usa gratis y si encuentra una página que le interese publicitarse, entonces dicha página le paga a Google y no se lo cobra al usuario.

Aquí en México, Google planea posicionarse todavía más: sus cifras hablan que 85% de usuarios de internet en nuestro país lo utiliza.

Famoso por su compra del portal de videos musicales Youtube, o por Google Earth, el sitio ahora busca entrar a México al segmento de las empresas medianas donde puedan darse cuenta de la importancia de internet para posicionarse.

El Senado está a punto de analizar la famosa ley del libro, en donde se estipula un precio único para los libros, con lo cual los consumidores de los libros podremos olvidarnos de tener descuentos o de elegir entre una y otra librería para poder comprar libros más baratos. Es un atentado en contra del consumidor de libros en México.

La ley fue apoyada por editoriales, en su mayoría españolas, y por varios escritores, argumentando que en países como Francia o España la tienen. Pero, ojo, en otros países como Inglaterra tuvieron que eliminar la medida.

Es exagerado y desmedido pensar que un precio único genera el hábito de la lectura. Mentira. El hábito de leer lo genera la educación y políticas de fomento a la lectura, no eliminar descuentos a los consumidores para favorecer a las editoriales con ventas aseguradas a precio controlado a… su favor.

Debemos decir que por diversas causas hay varios cambios en el gobierno de Felipe Calderón. Uno de ellos fue lamentable, el de Juan Antonio García Villa, el presidente comisionado de la Cofepris, que por cuestiones, aquí sí verdaderas, de salud tuvo que dejar la Cofepris. Es una lástima.

El otro cambio es el de Gladis López Blando, la subprocuradora de Profeco, que por alguna extraña razón dejó la Procuraduría Federal del Consumidor a cargo de Antonio Morales. Y conste que era una funcionaria echada para adelante que hacía su trabajo de comparar precios y calidades, como fue el caso de los cereales que cayó como bomba en algunos.

Y por último está el cambio de Manuel Rodríguez, subsecretario de Comunicaciones y Transportes, que aquí sí, por extrañas razones, ya no llevaba óptimas relaciones con el grupo de la SCT y queda mejor adscrito directamente a Luis Téllez como su coordinador.

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