Otra vez un jugador de Cincinnati está en la polémica, pero no por un asunto judicial, sino de un peculiar cambio de nombre
Mientras Adam Jones, de los Vaqueros de Dallas, ha pedido sin suerte que ya no le llamen ‘Pacman', Chad Johnson, de los Bengalíes de Cincinnati, ha hecho hasta lo imposible para que le digan ‘Ocho Cinco'.
El receptor de ‘Cincy' se aprovechó de la variedad de facultades que tienen las leyes de Estados Unidos para tramitar un cambio de nombre. Ahora, legalmente su onomástico es Chad Javon Ocho Cinco.
"No creo que nadie haya hecho algo así antes", dijo el jugador en el sitio web de los Bengalíes sobre su nueva locura. "¿Alguna vez he tenido una razón para hacer lo que hago? Solamente lo hago para divertirme".
La idea del nombre ‘Ocho Cinco', una referencia en español del número de jersey que trae puesto, viene de hace dos años, cuando se tapó su nombre con el onomástico numerado. El mariscal de campo Carson Palmer, le quitó el letrero, pero tal acción le llevó a Johnson ser multado por la NFL.
La propia organización de Cincinnati no está contenta con las ocurrencias del receptor, quien ha hecho festejos extravagantes tras sus anotaciones.
Sin embargo, las polémicas de Chad Johnson han sido relacionadas al futbol americano, a diferencia de otros de sus compañeros de los Bengalíes que se han metido en líos con la justicia y hasta acabaron en la cárcel.
Mientras Adam Jones, de los Vaqueros de Dallas, ha pedido sin suerte que ya no le llamen ‘Pacman', Chad Johnson, de los Bengalíes de Cincinnati, ha hecho hasta lo imposible para que le digan ‘Ocho Cinco'.
El receptor de ‘Cincy' se aprovechó de la variedad de facultades que tienen las leyes de Estados Unidos para tramitar un cambio de nombre. Ahora, legalmente su onomástico es Chad Javon Ocho Cinco.
"No creo que nadie haya hecho algo así antes", dijo el jugador en el sitio web de los Bengalíes sobre su nueva locura. "¿Alguna vez he tenido una razón para hacer lo que hago? Solamente lo hago para divertirme".
La idea del nombre ‘Ocho Cinco', una referencia en español del número de jersey que trae puesto, viene de hace dos años, cuando se tapó su nombre con el onomástico numerado. El mariscal de campo Carson Palmer, le quitó el letrero, pero tal acción le llevó a Johnson ser multado por la NFL.
La propia organización de Cincinnati no está contenta con las ocurrencias del receptor, quien ha hecho festejos extravagantes tras sus anotaciones.
Sin embargo, las polémicas de Chad Johnson han sido relacionadas al futbol americano, a diferencia de otros de sus compañeros de los Bengalíes que se han metido en líos con la justicia y hasta acabaron en la cárcel.
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