19 de Septiembre de 1985, tampoco se olvida.

Uno de esos días que no podremos olvidar ni dejar de lado, sólo queda guardar un solemne minuto de silencio y nuestros respetos por el gran esfuerzo de solidaridad que se demostró el pueblo para recuperar y salir de los escombros a la flagelada urbe capitalina; no sirve de nada buscar culpables (que si los hay, por supuesto!, no todo fue culpa de la naturaleza), solo exigir que ahora si las cosas estén hechas como deben, y que aquellos que sufrieron tal desgracia puedan estar recuperados mental y físicamente.