Stephon Marbury pasó por el quirófano para retirarle unas molestas esquirlas de huesto de la pierna izquierda y se pierde lo que queda de temporada.
En principio la operación de Marbury estaba previsto que durase 30 minutos, pero según apunta el New York Post la intervención se complicó y duró más de dos horas.
A Marbury le queda un año más de contrato con los Knicks (es el cuarto jugador mejor pagado de la NBA), pero teniendo en cuenta las nefastas relaciones que mantiene que Isiah Thomas es más que probable que no vuelva a enfundarse la camiseta del equipo de la Gran Manzana.
Esta temporada Marbury ha sido más noticia por sus plantones, muerte de su padre en el Madison y polémicas que por su juego en el parquet (13,9 puntos y 4,7 asistencias de promedio en 24 partidos).
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