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Julia Galvin llegó a Finlandia en busca de un hombre que cargara sus 120 kilos por un trayecto de 253 metros. El incentivo, ganar el título mundial de acarreo de esposa y con éste el peso de la mujer en cerveza.
Finalmente, Julia consiguió a un inglés que la cargó durante la carrera que incluyó una piscina y varios obstáculos. Pese a que no lograron el oro, la mujer dijo que lo seguirá intentando hasta tener en sus manos el título y la cerveza.
"Creo que vale la pena que me carguen, porque soy una fiesta andante," dijo Julia. El acarreo de esposas es parte de una serie de extraños concursos que los finlandeses realizan durante los escasos meses de verano.
Unas 48 parejas de 13 países -desde Kenia y Australia hasta Canadá- se reunieron en el remoto pueblo finlandés para competir en esa carrera. Al igual que en el 2007, Estonia resultó ganadora, mientras que Alemania se llevó la plata e Inglaterra el bronce.
El concurso también ha inspirado otras competencias como el fútbol en pantanos, la lucha de celulares y el canto de karaoke. Todos son parte de una ola estival de eventos que atrae visitantes y dinero mientras el sol brille hasta la medianoche.
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