DE REGRESO A ESPN? CUAUH..COMO HACES FALTA¡¡¡¡

Aun cuando ayer el presidente del América, Guillermo Cañedo, salió a dar el espaldarazo al técnico Daniel Brailovsky alejando todos los rumores sobre un posible cese, la realidad es que los dados están echados y si el domingo sufren una derrota con Pumas quedará fuera de la organización.
Es evidente que el horno no está para bollos y que Cañedo salió a cumplir su papel como conciliador y postura coherente en medio de la tormenta, sin embargo pesaría el no sumar puntos contra un rival (Pumas) considerado como plus en el futbol mexicano.
Los hechos son evidentes, Brailovsky no ha logrado imponer su estilo simplemente porque no sabe cómo transmitir todos los conocimientos que explayaba en la televisión, traducido en el hecho que no tiene trabajo de cancha y su equipo se ve sin recursos, sin poder modificar sobre la marcha y tratando de apostar a que algún chispazo de Cabañas o de sus jóvenes lo saque del atolladero.
La realidad es que desde el torneo anterior fue evidente que sus métodos no eran del agrado de los jugadores y que éstos lo respetan, pero no tiene la confianza del vestidor y esto es evidente a la hora de jugar.
Sin duda la directiva de América (Cañedo, Portilla, Yon da Luiza) tienen detectado este problema en el accionar americanista, pero han mantenido a Brailovsky tratando de que el equipo pueda responder por la propia voluntad de los jugadores, pero no por un aporte táctico de su entrenador.
En este asunto no se trata de supuestos. Brailovsky sabe hablar a la prensa, siempre tiene argumentos, pero ante sus jugadores es un secreto a voces que no hay trabajo de cancha.
Los propios caudillos del equipo se han sorprendido por medidas que tienen al América en este atolladero y que una derrota con Pumas determinará su salida y la contratación ya sea del Chepo de la Torre o de Rubén Omar Romano.