En una época en que salir de los reflectores puede ser una decisión capaz de arruinar una carrera, existe una cantante que no sólo ha regresado tras una ausencia de seis años, sino que lo ha hecho causando un grado de conmoción tal que sólo una diva como ella podría lograr.
Cuando muchos podrían pensar que los escándalos maritales y los problemas con las drogas serían suficientes para arrinconar a Whitney Houston en el olvido colectivo, la intérprete ha demostrado que viene dispuesta a recuperar el terreno perdido con su nuevo disco, I look to you, el cual sale hoy a la venta.
Y aunque muchos lo llaman el regreso del año, ella misma lo descarta en una de las nuevas canciones de su más reciente álbum. “No lo llamen regreso. He estado aquí por años”, canta Houston.
Visto desde su perspectiva debe ser cierto pues aunque no estuvo oficialmente ocupada en promociones, conciertos o grabaciones, la imagen de la cantante es difícil de olvidar cuando se toma en cuenta que se le considera la intérprete más galardonado en toda la historia con un total de 411 premios, entre los que se incluyen seis premios Grammy, dos Emmy, 23 American Music Awards y 16 Billboard Music Awards.
Ahora, con la salida al mercado de I look to you, su séptimo álbum de estudio, la cantante de 46 años podría tener un fuerte revulsivo en su carrera o podría confirmar, como lo explicó Caryn Ganz, editora de la revista Rolling Stone, que su momento ha llegado a su fin.
“Es un mundo de Beyonce. No creo que Whitney siga teniendo un puesto claro y no creo que tampoco lo tenga Madonna”, señaló Ganz, quien predijo que las primeras ventas serán fuertes y luego caerán pese a las buenas críticas que ha recibido de antemano.
Sin embargo, ni siquiera eso es suficiente para asegurar que este será el retorno definitivo de Houston, quien con su álbum previo Just Whitney (2002) también generó gran expectativa aunque finalmente resultó ser el disco con las peores ventas de su carrera.
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