Hoy por hoy, para el Milan es imposible hacerse con alguna de las dos primeras plazas de la Serie A, que ocupan Inter y Roma, y que dan acceso directo a la competición. Sin el título continental, se jugarán a todo o nada en dos partidos, a disputarse también en agosto.
"Hay que tener sentido común. Los Juegos Olímpicos no son una competición FIFA y la relación entre clubes y Comités Olímpicos es diferente. Si Kaká es convocado para Pekín, se perderá dos partidos vitales para el Milan, en los que nos jugamos muchísimo por todo lo que implica la Champions League, deportiva y económicamente", explico el ex internacional brasileño Leonardo, ahora en el staff ejecutivo de la entidad.
La semana pasada, el directivo Adriano Galliani ya explicó en persona esta decisión al presidente de la CBF, Ricardo Teixeira, en un encuentro que tuvieron en Zúrich. En cambio, estaría dispuesto a estudiar una posible cesión del joven Alexander Pato, quien tiene edad olímpica, pero con Kaká no hay debate posible.
El planteo del Milan afecta fundamentalmente a los jugadores extranjeros, ya que, como el propio Leonardo explicó, la Liga italiana ya llegó a un acuerdo con el Comité Olímpico local (CONI) para ceder los jugadores que sean llamados para acudir a los Juegos de Pekín.
En este caso, por ejemplo, no habría ningún inconveniente en liberar al Pato italiano, si es convocado. "Cuando la normativa fue realizada, no se tuvo en cuenta la liberación de futbolistas que actúan en el exterior y sólo se pensó en llegar a acuerdos entre Ligas y comités olímpicos locales", afirmó el dirigente brasileño.
Otros clubes italianos seguirán los pasos del Milan, como la Roma, que tampoco liberará al central brasileño, Juan, que entraría en el mismo caso que Kaká.
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