En Laredo, Texas, el lama budista Yongey Mingyur Rinpoché comparte la lectura “El Perrito que Aprendió a Meditar”
“Quién sabe cómo meditar, levanten la mano”, preguntó Yongey Mingyur Rinpoché a un nutrido grupo de niños reunidos ayer durante la lectura del libro “El Perrito que Aprendió a Meditar”.
Acto seguido, las manitas de algunos pequeños se vieron insistentes sobre sus hombros. “Pásale al frente y enseñen a sus papás que meditar el fácil”, añadió el monje budista, quien ayer culminó una visita de cuatro días a Laredo, Texas, en los que impartió una conferencia gratuita y un taller de meditación, como parte de un tour de enseñanzas titulado “La Alegría de Vivir”.
“Meditar es fácil y divertido, sólo hay que sentarse derechitos, juntar sus manitas, y dar tres respiraciones profundas, y ven ¡ya están meditando!”, dijo el lama a los niños, mientras éstos gustosos celebraban aplaudiendo.
Con la traducción al español de Daniela Labra, instructora de Casa Tíbet México, el lama budista fue narrando paso a paso la lectura infantil con su característico sentido del humor, que le ha valido atraer a miles de seguidores por todo el mundo en sus giras de enseñanzas budistas.
En el evento también estuvo el alcalde de Laredo, Texas, Raúl Salinas, quien a nombre de la Ciudad entregó un reconocimiento a Yongey Mingyur Rinpoché por su contribución a la búsqueda de la paz y la armonía a través de generar un cambio interior en cada persona a través de la práctica de la meditación.
Salinas destacó la importante labor que realiza Casa Tíbet México a través de sus representaciones en Laredo, Texas y Nuevo Laredo.
La lectura del libro “El Perrito que Aprendió a Meditar”, que es de la autoría del lama budista, se llevó al cabo este domingo por la mañana en el Hotel La Posada, en el centro de Laredo, Texas.
Con el tour “La Alegría de Vivir”, Mingyur concluye un largo ciclo de enseñanzas para tomar un retiro de tres años, tres meses y tres días, en el viejo continente, que iniciará en mayo del próximo año.
Posteriormente retornará para compartir nuevas enseñanzas. Mingyur nació 1975 en Nubri, Nepal, y es uno de los más promisorios maestros de la nueva generación del budismo tibetano fuera del Tíbet.
Su forma cándida y a veces graciosa de exponer sus propias dificultades personales, le ha valido el aprecio de miles de estudiantes budistas y no budistas alrededor del mundo
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