El anti once del Torneo Apertura 2008

Portero: Christian Martínez (Monterrey)
Ya había sido relegado a la banca de los Rayados por el juvenil Jonathan Orozco, quien incluso fue llamado a la Selección Nacional. La pésima temporada de Monterrey obligó a Ricardo Lavolpe a buscar soluciones y le regresó la titularidad a Christian Martínez, quien sólo aportó inseguridad en la zona baja del equipo y se comió algunos goles.

Lateral izquierdo: Ismael Fuentes (Jaguares)El chileno tardó más en regresar a la actividad tras la suspensión de seis partidos impuesta la temporada pasada que en hacerse expulsar de nuevo. Es uno de los líderes de Jaguares, sí, pero también la viva imagen de la indisciplina que priva en la plantilla chiapaneca. No basta ser líder, hay que actuar como tal.

Defensa central: Daniel Demetrio Hernández (Jaguares)La horrenda temporada de la defensiva chiapaneca tiene una explicación: la indisciplina. Daniel Demetrio había mostrado buenas cosas el torneo pasado pero en el Apertura 2008 se dedicó, como el resto de sus compañeros, a repartir patadas a las piernas contrarias en lugar de dárselas al balón. El resultado: tres expulsiones para Hernández y Jaguares tuvo la peor defensa al recibir 34 goles.


Defensa central: Marco Antonio Palacios (UNAM)
Sólo hubo dos alegrías en la temporada del “Pikolín”: el golazo que marcó en la Liga de Campeones de Concacaf y pertenecer a la mejor defensiva del torneo. De ahí en fuera, Marco Antonio fue un desastre. Atrabancado, desubicado, tuvo algunas buenas intervenciones pero otras desatenciones graves que le costaron a Pumas perder puntos en el camino. A sus 27 años no parece que vaya a dar el estirón.

Defensa central: Sebastián Domínguez (América)
El argentino llegó procedente de Estudiantes de la Plata como estrella y se fue por la puerta de emergencia. Pese a lo dicho por su promotor Leo Rodríguez, Domínguez nunca fue la solución en el cuadro bajo azulcrema y la oportunidad (medio obligada) que le dio el “Pelado” Díaz no fue aprovechada por el jugador. Un petardo más para las Águilas.

Lateral derecho: José Antonio Castro (América)

No nos explicamos cómo este jugador llegó a ocupar la posición de lateral cuando se nota que nunca aprendió a mandar un centro. El “Gringo” Castro es todo pundonor, pero en el futbol moderno los laterales deben aportar a la ofensiva y no es el caso del ahora examericanista. Ni por derecha ni por izquierda le funcionó al “Pelado” Díaz.

Medio defensivo: Marcelo Sosa (UAG)
El “Pato” Sosa siempre ha tenido fama de conflictivo y con los Tecos lo demostró. Varios enfrentamientos con el técnico José Luis Trejo lo pusieron cerca de salir de la institución, pero la salida del estratega y la llegada de Miguel Herrera amainaron la tormenta. Sin embargo, el carácter de Marcelo seguramente seguirá dando de qué hablar.

Medio creativo: Walter Gaitán (Necaxa)
Un equipo que promedió un gol por partido durante el torneo tiene que preguntarse dónde quedaron sus figuras en ataque. El “Chueco” estaba llamado a ser el motor ofensivo de los Rayos pero al parecer le dio flojera. Una lástima que jugadores talentosos como Gaitán se dediquen a caminar sobre el terreno de juego. Jugó diez partidos y lo mejor que hizo fue anotarle un golazo al América.

Medio defensivo: Germán Villa (América)

Una elección polémica si recordamos que Villa casi no tuvo oportunidades en el once titular de las Águilas. Sin embargo, desde que Ramón Díaz anunció que el puesto había que ganárselo Germán se dedicó a decir que si no jugaba se iba, en lugar de trabajar por un lugar. Finalmente la contención azulcrema fue del paraguayo Enrique Vera y Villa se fue por la puerta de atrás. Lamentable para una de las figuras históricas del conjunto de Coapa.


Delantero: Christian Correa (Pachuca)El brasileño llegó con un buen cartel al conjunto hidalguense tras su paso por algunos clubes de Europa. Se esperaba que fuera la solución a la carencia de un “9” en los Tuzos, pero ni él ni Bruno Marioni hicieron la diferencia. El argentino se la pasó lesionado, pero lo mejor que hizo Christian fue meter el gol 60 mil en la historia del futbol mexicano. Para la anécdota.

Delantero: Blas Pérez (Tigres)El club felino se ha caracterizado por traer jugadores por costos muy altos. Tal fue el caso del panameño Blas Pérez, quien de apenas jugar en el Hércules de la segunda división española llegó como la salvación de Tigres. No hubo tal. Manuel Lapuente prefirió darle minutos a Francisco Fonseca, Julio Aguilar y algunos novatos antes que a Blas. Terminó la temporada y adiós al panameño.

D.T. Mario Carrillo

Tomó el mando del Puebla en lugar de José Luis Sánchez Solá con la misión de librar los problemas de descenso, cuando La Franja acumulaba siete puntos en ocho encuentros. Nueve jornadas después consiguió las mismas ocho unidades, se ganó la enemistad de varios jugadores como Joaquín Velázquez (a quien dio de baja por sus creencias religiosas) y la burla general al conocerse la historia de su famosa “bruja”.