Gobierno federal toma instalaciones de Luz y Fuerza y anuncia su liquidación

Grupos de la Policía Federal han sido acuartelados con el objetivo de ocupar instalaciones de Luz y Fuerza del Centro (LyFC) en los siguientes días, alertó el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME).

El objetivo de la ocupación es para impedir que los electricistas tomen dichas instalaciones para provocar un gigantesco apagón en el área de control del SME, que es en el Distrito Federal, Estado de México, Puebla y parte de Hidalgo y Morelos, en caso de que no se le otorgue la toma de nota al dirigente electricista, Martín Esparza Flores.

Por ello, el SME, citaron “fuentes confiables”, alertó sobre este plan del gobierno y se deslindó de cualquier acción tendiente a ocupar las instalaciones y provocar el apagón.

“Nos deslindamos clara y contundentemente de una acción de esa naturaleza. Lo hacemos desde la más alta responsabilidad que nos otorgan los ya casi 95 años de existencia de nuestro sindicato y por nuestro absoluto compromiso para con nuestros usuarios, quienes son, a fin de cuentas, los auténticos beneficiarios de la nacionalización de la industria eléctrica, que apenas este 27 de septiembre conmemoramos con una marcha-mitin del Monumento de la Revolución al Zócalo de esta ciudad”, recalcó el gremio.

Sostuvo que no existe motivo legal por parte de las fuerzas federales para ocupar las instalaciones. “Categóricamente desmentimos al gobierno federal; el SME no pretende afectar en ningún sentido el suministro de energía eléctrica en nuestra zona de atención”, apuntó Fernando Amezcua Castillo, vocero del sindicato.

“Denunciamos ante las organizaciones sindicales, sociales y políticas, a la opinión pública, al pueblo de México y a los medios de comunicación sobre la pretensión de las autoridades federales de agredir y atentar contra nuestra empresa y nuestro sindicato, con el objeto de obligarnos a negociar lo innegociable; no lo aceptaremos bajo ninguna circunstancia”, agregó.

Esparza Flores y su planilla están a la espera de que la Secretaría del Trabajo y Previsión Social otorgue la toma de nota al dirigente, después de que éste ganara los comicios internos de junio pasado, aunque la otra planilla contendiente, Transparencia Sindical, impugnó los resultados al alegar compra de votos y alteración del padrón electoral a favor del dirigente.